Barcelona es famosa por la arquitectura caprichosa de los edificios del genio de Gaudí y por su modernidad mediterránea. Pero muchos desconocen la gran variedad de vinos de calidad que se producen en estas tierras; por lo que hacer enoturismo por Barcelona se erige como una de las experiencias más emocionantes para los catadores/as de esa bebida milenaria.
Y es que la variedad orográfica y los diferentes microclimas de la región dan lugar a vinos muy diferentes. Existen, de hecho, tres denominaciones de origen que acreditan la calidad de los vinos producidos en la provincia de Barcelona: DO Penedés, DO Pla del Bages y DO Alella.
Muchos/as enólogos/as por tanto recomiendan vivir una aventura de enoturismo por Barcelona, ya que podéis organizarrutas que recorren las principales y más antiguas bodegas de la región. En este artículo os recomendaremos algunos para ayudaros a diseñar vuestro recorrido vitícola.
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Los mejores lugares para hacer Enoturismo por Barcelona
Visitar los lugares más emblemáticos dedicados al vino en Barcelona es un buen plan que se puede compartir en pareja, en grupo, o por qué no, en el contexto de un viaje de negocios. El caso es que el Enoturismo por Barcelona puede ser una experiencia inolvidable para cualquiera que ame el mundo vinícola. Veamos a continuación los lugares que debéis visitar en esta aventura:
Bages
Podéis empezar el recorrido por una de las bodegas más significativas, la DO Pla del Bages, dentro de la provincia. Os aconsejamos visitar primero las Masies d´Avinyó, cuna de los vinos de Abadal; bodega que comenzó a elaborar vinos a finales del siglo XII. Allí es donde el espléndido panorama y el encanto de la antigua masía contrastan con sus modernas instalaciones. También podéis visitar la bodega museo para conocer más sobre los vinos tintos y blancos de la casa.
Ir a Oller del Mas representa una visita obligatoria, en este lugar os recibirá un majestuoso castillo del siglo X. En este espléndido lugar, la historia y la tradición conviven en armonía y dan vida a vinos como Châtau Arnau Oller. Es importante destacar que la familia Margenat es la actual propietaria de las más de 400 hectáreas de viñedos y bosques que rodean las bodegas.
El Penedès es la mejor región vinícola
A 30 kilómetros de Barcelona, los/as viajeros/as más curiosos/as y fascinados/as con la idea de realizar enoturismo por Barcelona. Estos son recibidos por la hospitalaria localidad del Penedès, la meca de las famosas bebidas alcohólicas de Torres, Codorníu y Freixenet.
El Penedès es la mejor zona vitivinícola, con 110.000 hectáreas de viñedo cultivado situado a diferentes alturas; llegando en ocasiones a los 800 metros sobre el nivel del mar. Lo que permite cultivar no solo las uvas autóctonas Xarel·lo (Xarel·lo), Macabeo (Macabeo) o Parellada (Parellada). Si no también variedades del norte de Europa como Chardonnay o Riesling.
Con una gran selección de vinos blancos, espumosos, rosados y tintos, Penedès es el mayor productor español de vino espumoso llamado cava (“bodega”, por su traducción en catalán). Ya que la crianza en bodega es una etapa integral e importante en la elaboración de esta exquisita bebida.
Y no podéis iros del Penedès sin visitar una de las bodegas más conocidas de la comarca: Freixenet que elabora el cava más conocido de toda la región catalana. Su perlado es conocido en todo el mundo, al igual que sus vinos. Fue fundada en 1861 por Francesc Sala Ferrés, pero no fue hasta 1914 cuando se empezó a elaborar el famoso cava, un vino espumoso inspirado en el champán francés.
Codorniu: La ciudad subterránea del vino
Cantina Codorniu se enorgullece de su milenaria historia, dado que es la empresa familiar más antigua de toda España. Fue aquí donde se celebró la primera botella de vino espumoso cava catalán, marcando así el comienzo de toda una era de esta bebida tan venerada hasta nuestros días.
Se dice que el año de nacimiento de esta bebida catalán fue en 1872, cuando el propietario de Codorniu Giuseppe Raventos abrió la primera botella de vino espumoso. En 1877, el cava catalán sustituyó al champán francés “Vedova Clicquot” en los banquetes reales y recién en 1880 se puso a la venta.
El edificio Codorníu es una obra maestra del arquitecto modernista Josep Puig i Cadafalch, construido en 1915 y es un monumento arquitectónico protegido por el estado. Codornu es una sorprendente ciudad subterránea con decenas de kilómetros de vías subterráneas, túneles y nichos, donde los vinos blancos, rosados y espumosos toman fuerza. Aquí se produce una media de 35 millones de botellas al año.
La Alella
Vuestra aventura de enoturismo por Barcelona puede terminar en la propia ciudad donde encontraréis una denominación de origen urbano, la Alella. Con apenas 600 hectáreas sus vinos, principalmente blancos, se venden casi exclusivamente en la Ciudad Condal donde son muy apreciados.
La bodega Alella Vinícola es una de las más antiguas y elabora vinos espumosos de excelente calidad desde 1906. Los vinos de Marfil son uno de los productos más vendidos y podréis degustarlos en visitas guiadas, incluso es posible que tengáis la oportunidad de visitar las plantas con las que se elabora este magnífico vino.
Vinotecas
Incluso en Barcelona, gracias a la creciente cultura del vino, las vinotecas se han convertido en un punto de referencia para un aperitivo entre compañeros/as o una cena con amigos/as. Junto a los famosísimos bares de tapas y pichos, en la capital catalana se abren y aparecen vinotecas que representan un visita obligada en cualquier tour de enoturismo por Barcelona.
En estos lugares podéis degustar las excelentes etiquetas españolas, que desde hace algunos años se han consolidado en el panorama vitivinícola mundial. He aquí algunas de ellas:
- Monvinic: Es una bodega con más de 4.000 etiquetas. Considerada como una de las mejores vinotecas del mundo (del ranking 2010), es un lugar enteramente dedicado al placer del vino. Se divide en dos áreas: un largo mostrador con taburetes y otro con cómodos sofás.
- El Diset: Entre estanterías y cavas refrigeradas que mantienen las botellas a la temperatura adecuada, en esta vinoteca podéis degustar unas 60 variedades de vino (blanco, rosado, tinto y espumoso), la mayoría de origen catalán y español.
- La Bodega Torres: En este lugar tendréis el mundo del vino a vuestros pies, o mejor dicho, en vuestras boca. La bodega ofrece una amplia oferta de catas y una completa carta gastronómica, que hacen de La Vinoteca Torres un punto de referencia para los amantes del néctar de Baco.
Conclusiones
Como veréis, esta región está rodeada de viñedos, por lo que no faltan opciones para hacer enoturismo por Barcelona. Eso sí, el primer paso para garantizar una experiencia épica es definir la ruta. Además, Barcelona es también el territorio con más viñedos ecológicos de España. Por ello, puede ser interesante incluir en vuestra ruta una bodega que practique el cultivo sostenible.
Las visitas habituales incluyen un itinerario en viñedos, durante el cual se presenta la cultura local y el proceso de elaboración del cava, y finaliza con una degustación de diferentes productos.